Utilizamos cookies propias y de terceros para mejorar nuestros servicios. Si continúa navegando, consideramos que acepta su uso.

Tour de Francia 2024: 'Bienvenue chemins blancs'

SUSCRÍBETE

Álvaro Rubio | 07 Jul 2024

Tour de Francia 2024: 'Bienvenue chemins blancs'

Tour de Francia 2024: 'Bienvenue chemins blancs'

Compartir

La introducción de elementos que distorsionen el statu quo de una receta permite descubrir sabores nuevos y originales; cuando estos ingredientes están en manos de los mejores chefs el resultado alcanza un nivel de excelencia superior. El debut de los caminos de grava en la ronda gala escondían cierto misterio y han acabado proporcionado un escenario mayúsculo convirtiendo la culminación de la primera semana en una ventana temporal hacia la primavera en pleno mes de julio. Y el enésimo capítulo de la osadía irracional de una generación de ciclistas que no comprende el significado de la palabra conservar.

Los rostros rebosantes de polvo y la mirada perdida de los ciclistas en Troyes eran el espejo de una jornada marcada por un ritmo asfixiante, ataques, contraataques, sentido táctico y fatiga, mucha fatiga. La etapa ha desprendido un aroma a clásica difícil de disfrutar asiduamente en las grandes vueltas, no digamos el Tour de Francia. Se trataba de un lienzo en blanco en el que Anthony Turgis ha firmado un desenlace soberbio. El francés ha resuelto la fuga con un esprint al límite tras un esfuerzo titánico por parte de todos sus integrantes, que nunca se han desprendido del aliento del grupo de favoritos.

Suscríbete a VOLATA, tu revista de cultura ciclista

En ese contexto, el destino ha sido cruel con Jasper Stuyven. El belga ha atacado antes del último tramo de grava en un movimiento que parecía definitivo, pero la cadencia de su pedaleo disminuía al mismo ritmo que las muecas de agotamiento se apoderaban de su cara. El del Lidl-Trek ha sido engullido en la pancarta del último kilómetro, momento en el que empezaba el juego propio de un esprint en fuga: miradas recelosas, desconfianza, bandazos…

Alexey Lutsenko ha iniciado la secuencia con un intento más por corazón que por fortaleza. El kazajo ha servido de lanzador en una volata agónica en la que el Tugis ha encontrado el hueco en la parte central para batir a Thomas Pidcock, Derek Gee y Álex Aranburu, que ha confirmado el cambio de mentalidad de un Movistar Team proactivo y protagonista.

Suscríbete a VOLATA, tu revista de cultura ciclista

Y en paralelo, el desarrollo de una batalla por la clasificación general que ha acabado en tablas con matices. La fusión de Remco Evenepoel y Tadej Pogačar es un cóctel explosivo y un auténtico regalo para el espectáculo. Primero lo intentó el belga con un órdago a 90 km de meta que acabó en desencuentro con Jonas Vingegaard por no entrar al relevo. Después fue el turno del esloveno, que tensó en la parte final sin el rédito que hubiera deseado. Pero ambos estuvieron demasiado aislados.

El bloque del Visma-Lease a Bike se convirtió una vez más en la salvaguardia de Vingegaard para salvar la papeleta con la sombra de la avería sobrevolando tras cambiar la bicicleta con Jan Tratnik por un pinchazo. El Tour echa el telón de la primera semana en un tapiz gravel silvestre y pedregoso en la zona de la Campaña francesa que distaba mucho del sterrato fino conocido en Italia, pero que ha llegado para quedarse.